domingo, 28 de marzo de 2010

A reconstruir el turismo

(Esta nota también puede leerla en www.evelynpfeiffer.com)

Después del terremoto el turismo ha estado flojo y las publicaciones sobre turismo mucho peor. Ayer La Tercera sacó un tímido reportaje sobre Chile Chico en el Suplemento Tendencias. Hoy la revista del Domingo de El Mercurio lleva en portada “10 viajes para levantar Chile”. Mis aplausos a El Mercurio porque creo que éso es lo que hay que hacer! No se trata de esconder la cabeza y decir aquí nada ha pasado, se trata de decir “sí, tuvimos un cataclismo, pero la mayor parte de Chile -y del Chile más turístico- no fue afectado y puede viajar con tranquilidad y maravillarse de nuestros paisajes”.

El aeropuerto funciona (en carpas, pero funciona y quizás más eficiente que antes. Puede leerlo aquí). Las zonas afectadas ya irán regresando a la normalidad con los años. Pero el resto de Chile sigue y debe seguir.

miércoles, 24 de marzo de 2010

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Ya está arriba mi sitio web www.evelynpfeiffer.com
Viajes + fotos + un poco de todo lo que me gusta hacer.

Espero lo disfruten!

Aeropuerto a la antigua

Dos semanas después del terremoto fui con mi madre a Copiapó. Nos cambiaron fecha y hora de los pasajes y las instrucciones fueron estar 2 horas antes en el aeropuerto. Sabíamos que el tema estaba re complicado, pero verlo con los propios ojos fue distinto.

De un aeropuerto moderno (o que creíamos moderno) pasamos a un par de carpas, baños químicos, unos restaurantes improvisados, agua gratis que reparten en vasitos plásticos, trabajadores en polera y zapatillas y muchísimo ruido de turbinas. Da pena, conmueve y da mucha vergüenza que nuestra puerta de entrada esté TAN terremoteada.

Sí doy fe -y otras personas me han dicho lo mismo- que el sistema funciona mucho, mucho más rápido. Por ejemplo al regreso sólo nos demoramos 15 minutos desde que aterrizamos hasta salir: esperamos en el avión, bajamos por las escaleras, caminamos por la pista y un señor con un megáfono nos anunció que las maletas apiladas eran las de nuestro vuelo. ¡Y ya estábamos afuera tomando un taxi!

Este terremoto nos dejó varias enseñanzas, pero una que se repite es que a la antigua funciona mejor.